5 consejos de nuestros abuelos para ahorrar en casa
Así ahorraban nuestros mayores... y podemos ahorrar nosotros
La sabiduría popular es en muchas ocasiones la mejor herramienta para ahorrar en nuestra economía doméstica. Nuestros abuelos son pioneros en el arte de llegar a fin de mes y aprovechar al máximo los recursos del hogar sin consumir en exceso. ¿Cuáles de estos trucos podemos utilizar en nuestro día a día para ahorrar de una manera sostenible?
Te mostramos a continuación cinco de estas ideas -¿ya conocías alguna?- y te invitamos a compartir las tuyas.
Insecticida natural
Muchas personas son alérgicas a los insecticidas, que además pueden resultar dañinos para la capa de ozono si son aerosoles. La solución para evitar que las polillas se den un festín con nuestra ropa es rociar unos granos de pimienta negra dentro de los armarios. Las polillas no se acercarán y así es como antes la gente conservaba en perfecto estado su vestimenta.
El horno como fuente de calor
Seguramente uno de los recuerdos más bonitos de la infancia que todos guardamos es el de aquellas tardes en la cocina de nuestra abuela, viéndola cocinar y sintiéndonos plenamente protegidos.
Quizás un factor que ayudaba era que, en plena faena culinaria, la abuela sabía que desconectar la calefacción o el brasero y abrir el horno ya apagado tras haber estado funcionando ahorraba dinero y proporcionaba un calor más que agradable.
Sácale partido a la olla a presión
¿Tienes una olla a presión en casa? Es probable que sí. ¿La has utilizado alguna vez? Es probable que no. Pues es momento de cambiar eso. ¿Sabías que las verduras salen mucho mejor al vapor en una olla a presión? Y además, ahorrarás energía porque toda la comida se prepara en un tiempo reducido.
Espera a juntar mucha ropa para planchar
Este truco tiene que ver con la plancha. En la medida de lo posible, es aconsejable evitar usarla cada vez que necesites planchar una prenda. Acostúmbrate a acumular una buena cantidad de ropa para utilizarla.Ahorrarás energía, tiempo y dinero.
Compra productos frescos a diario
Por último, trata de hacer la compra de productos frescos al día o como mucho cada dos días. A nuestras abuelas les gusta ir asiduamente al mercado, y aparte de que ayudarás a fomentar el consumo local responsable, te asegurarás de que no caduque y podrás evitar tirar comida a la basura.